Desde los inicios de la civilización occidental el solsticio de verano ha sido una noche llena de esoterismo y encanto. Los antiguos griegos llamaban a los solsticios «puertas», y afirmaban que el de verano era para los hombres, mientras el de invierno era para los dioses. Este es el origen de muchas de las leyendas de la Noche de San Juan. Esa noche se encienden las hogueras en cada localidad de España y se invoca la magia que los antiguos paganos atribuían a la noche más corta del año.
La liberación
La creencia griega ha llegado hasta nuestros días y hay quien dice que en esa noche mágica las puertas se abren a otras dimensiones. Los mortales tienen acceso a grutas secretas, castillos inaccesibles y palacios encantados de los que se liberan princesas moras e infantas cautivas. Pero por esas puertas también entran seres venidos de otros mundos, no siempre benevolentes, como duendes y hadas.
El oro
También entre las leyendas de la Noche de San Juan se cuenta que puede verse a una gallina y sus polluelos que tientan a los que celebran la fiesta con sus plumajes de oro. Los tesoros se agitan en sus escondrijos y las losas que los cubren se abren para quien tenga la suerte de pasar por allí y ver el resplandor áureo.
Zacarías
Hay una leyenda con base en la Biblia que relaciona al santo con el fuego. Cuenta que Zacarías, su padre, dudaba del embarazo de Isabel, su madre. Por ello perdió la voz, atributo que recuperó al nacer Juan. El hecho le fue anunciado por el Arcángel Gabriel y en agradecimiento Zacarías encendió hogueras para celebrar el nacimiento.
El pueblo sumergido
Cuentan que al pueblo de Valverde de Lucerna, en Zamora, llegó un día un peregrino y pidió pan a los vecinos. Solamente dos mujeres se apiadaron de él y por ello golpeó el piso con su cayado, pues era Jesús, e hizo brotar del suelo una fuente inagotable. Avisó a las mujeres que se fueran y el pueblo quedó sumergido para siempre. Cuentan las leyendas de la Noche de San Juan que en la mañana del día del santo se oye un tañir de campanas en el lago de Sanabria.
Labradores de Alicante
La purificación que simboliza el fuego está reflejada en un ritual que hacen los labradores de Alicante. Queman en la Noche de San Juan enseres y materiales sobrantes con el fin de espantar al Diablo y lograr que se vaya de la región.
Los Caballucos del Diablo
En Cantabria se busca trébol de 4 hojas para asegurar que la fiesta no será arruinada por unos seres amenazantes llamados los Caballucos del Diablo. Estos tres caballos alados aparecen atraídos por la luz de las hogueras, como si fueran insectos, y están decididos a acabar con la celebración. Por eso vuelan sobre el lugar relinchando y bramando para espantar a los concurrentes. Solo el trébol de 4 hojas puede ahuyentarlos pero no son fáciles de encontrar porque antes de la fiesta los caballos se los comen, pero siempre quedan algunos y es preciso encontrarlos.
Las Anjanas
Son otra leyenda de Cantabria que habla de estas hadas bellas, seres delicados y benevolentes que aparecen para hacer el bien. Es una de las más hermosas leyendas de la Noche de San Juan
La Font de Jana
Cuentan las leyendas que en la Noche de San Juan y cerca del pueblo de Teulada, en la Comunidad de Valencia, está ubicada la Font de Jana. Allí aparece Joanina, un hada que puede concederte un deseo. La condición es que la lleven a Teulada en la espalda, pero no puedes voltear a mirarla o el deseo no se concederá.
Los poderes de las plantas
Se cuenta entre los mitos y leyendas de la Noche de San Juan que las plantas venenosas dejan de serlo mientras que las hierbas medicinales multiplican sus virtudes, por lo que es el momento perfecto para salir al monte a recogerlas. También se cree que el helecho florece esa noche, brindando buena suerte a quien lo posea. Los árboles a los que se haga una cruz en el tronco la Noche de San Juan darán el doble de fruto y quien vea florecer esa noche la planta de hierbabuena tendrá buena suerte siempre y cuando lo mantenga en secreto.
El espejo
Entre los mitos espeluznantes de la Noche de San Juan está el de no mirarse al espejo. Se cuenta que en ese caso se verá al mismísimo Satanás reflejado. Tómalo en cuenta cuando te prepares para tus rituales.